Formación online. CAER: Cuidados y Autocuidados Emocionales Recíprocos.
Formación online. CAER: Cuidados y Autocuidados Emocionales Recíprocos.
-Desarrollo de habilidades de reconocimiento y reconexión hacia la regulación y la orientación de lo emocional como base de la cultura del cuidado-
Los autocuidados emocionales nos permiten reactivar nuestro sistema de autodefensa interno, que solemos tener suprimido por la influencia de educaciones violentas basadas en el sometimiento.
La educación sometedora que la mayoría de nosotras hemos recibido, así como la cultura patriarcal, nos lleva a tener que anestesiar o desconectar en parte la conexión con nuestras emociones.
Así, en la base, el autocuidado emocional partiría de la reconexión con el propio sistema emocional y la capacidad de regularse.
No obstante, ofrecer un curso de autocuidados es un reto que ha de tratarse con extrema responsabilidad.
El concepto autocuidados se ha tergiversado de varias maneras al servicio de una sociedad capitalista y patriarcal, convirtiéndolo en un agente de presión y sometimiento más para las mujeres.
Por una parte, se nos ha vendido el autocuidado como valor asociado al consumo de bienes y servicios ligados a estándares de belleza y salud, al servicio de la economía.
Por otra parte, se ha transmitido que el autocuidado es un acto individual, separado de lo colectivo, responsabilidad y obligación de cada persona por sí misma, al servicio del sometimiento patriarcal.
Así, la manipulación social del concepto ha convertido a la noción de autocuidado en agente violento más contra las mujeres.
Por ello, es esencial tener presente que el autocuidado es un conjunto de actos desligados del consumo, enraizados en lo emocional y que requieren del sostén del colectivo.
En este curso vamos a consolidar el autocuidado emocional como el camino hacia la reconexión con una misma, con las propias emociones como guía y orientación vital, hacia la reconstrucción del vínculo de nuestras niñas internas con las adultas que somos, desde el reconocimiento pleno de la necesidad de cuidados mutuos y redes de sostén, reactivando así nuestros sistemas internos de protección y defensa para la construcción de entornos emocionales seguros.
