Vivencia Emocional Aceptante (Programa de desarrollo personal on-line)
Reconecta Contigo y Vive Plenamente tus Emociones
La sociedad y la cultura en que vivimos, centradas en el hedonismo, el consumo y la producción, que empuja a las personas a la satisfacción de deseos y necesidades de manera inmediata, es una sociedad que impulsa a negar el dolor o el malestar, invisibilizándolo, tratando de apartarlo de la vida cotidiana, de simular que no existe.
Así, en el ámbito social, no se permite espacio para el dolor o el malestar. El enfoque que socialmente se transmite de las emociones disfóricas y del dolor es la búsqueda de alivio rápido e inmediato para poder proseguir en la vida productiva y placentera que la sociedad de consumo sí permite.
De este modo, las personas vamos introyectando la censura social del malestar, de lo que se aleja de ese canon de bienestar emocional que la sociedad trata de imponer.
Muchas personas conviven con la sensación casi permanente de que algo en ellas no está bien, de que no cumplen sus propias expectativas o las de las demás, de que están incompletas o que no deberían sentirse como se sienten. Así, desde pequeños, vamos aprendiendo a autocensurarnos, a prohibirnos ciertas emociones, a juzgarnos por ello.
Entramos en lucha con nosotras mismas, tratando de evitar o eliminar emociones tan naturales y esenciales en el ser humano como pestañear o respirar, pues las emociones disfóricas son inherentes a la naturaleza humana.
Desde aquí, la experiencia emocional suele ser de angustia, en mayor o menor medida, de inquietud, de culpabilidad. Asimismo, la persona se juzga, invalidando su emoción, con pensamientos del tipo: “no debería sentirme así”, “no tengo motivos para sentir esto”, “soy una desagradecida, que se amarga la vida sin motivo y se la amarga a los demás”.
Es este intento de negar el malestar es el que nos deja sin punto de apoyo, el que nos aleja de nuestra realidad, nos desconecta de nosotras y de la posibilidad de profundizar en una misma, de manera aceptante, para integrar la experiencia y poder tener una vivencia emocional y vital plena.
La experiencia emocional aceptante es la que recoge lo que hay, integra lo que está pasando sin negarlo, observa lo que está aquí y ahora sin intentar huir de ello, nos acerca a nuestra esencia, nos pone en contacto con nosotras mismas, con nuestro ser genuino y auténtico, y es a partir de esta aceptación desde la que establecemos nuestro suelo, nuestro punto de apoyo para transitar el desarrollo vital, desde experiencias equilibradas y enriquecedoras sobre lo real.
El trabajo sobre aceptación y autoescucha nos puede llevar a lograr experiencias emocionales integradas. La experiencia emocional aceptante tiene consecuencias muy positivas en la persona, en la relación consigo misma y con las demás, así como en la manera de relacionarse con la propia vida.
De este modo, en última instancia, se trata de iniciar un camino personal de reconciliación y reconexión con una misma que facilite una experiencia vital plena y relajada.
Para apoyar este proceso a las personas que deseen iniciarlo, propongo un programa de desarrollo personal: Vivencia Emocional Aceptante, con el que pretendo ayudar a las personas a que logren:
- la capacidad de identificar y conectar con su experiencia emocional y los juicios que a la misma imponen
- una perspectiva libre de juicios de la propia vivencia emocional
- la posibilidad de entrar en contacto con la vivencia emocional personal auténtica, genuina y autovalidante
- la capacidad de dejar de luchar contra las propias emociones
- la posibilidad de entender la propia experiencia emocional como parte integrada de una misma, perdiendo la necesidad de control y evitación
- la perspectiva responsable y consciente sobre la propia vivencia emocional, desarrollando relaciones menos violentas con una misma y con los demás
- la capacidad de identificar el relato sobre la propia experiencia emocional, lo que nos contamos sobre ella para poder detener el relato y centrarnos en la vivencia
- poder detectar la desconexión con la propia esencia, tomando conciencia de la autoimagen emocional introyectada
- la posibilidad de lograr una autoimagen basada en la integración y sensación de plenitud, desprendiéndose de la sensación de carencia permanente
- el conocimiento de las partes de la propia experiencia con las que se está en guerra, a partir de lo que la vivencia de malestar nos muestra
- la capacidad de autosostenerse, cuidarse y aceptarse incondicionalmente
- una experiencia empoderante y transformadora de auto aceptación que permita una vida más plena
Este curso es para ti sí:
- no te encuentras nunca bien del todo y te culpas por ello
- sientes que estás siempre buscando algo que no llegas a encontrar
- te sientes incompleta, como si te faltase algo
- estás agotada física y emocionalmente
- te sientes incomprendida, sola y con pocos apoyos emocionales reales
- deseas dejar de presionarte
- quieres cuidarte y no sabes por dónde empezar
- te gustaría dejar de juzgarte y empezar a aceptarte
- quieres relacionarte contigo desde lo que realmente eres, superando la autoimagen construida desde la imposición social o el “debería”
- deseas dejar de buscar un sostén en el exterior y empezar a encontrarlo en ti misma, ser tu propio sostén emocional
- quieres vivir tus emociones plenamente, sin censuras
- quieres empoderarte emocionalmente y aceptarte
